La circuncisión es la extirpación quirúrgica de la piel que cubre la punta del pene. El procedimiento es bastante frecuente entre los recién nacidos varones de determinadas partes del mundo, incluso en los Estados Unidos. Es posible realizar la circuncisión después del período neonatal, aunque es un procedimiento más complejo.
Para algunas familias, la circuncisión es un ritual religioso. El procedimiento también puede ser un tema de tradición familiar, higiene personal o cuidado preventivo de la salud. Sin embargo, otros consideran que la circuncisión es innecesaria o que es una desfiguración.
Por qué se realiza
La circuncisión es un ritual religioso o cultural para muchas familias judías e islámicas, así como para ciertas tribus aborígenes de África y Australia. La circuncisión también puede ser un tema de tradición familiar, higiene personal o atención médica preventiva.
A veces, existe una necesidad médica de realizar la circuncisión; por ejemplo, cuando el prepucio está demasiado apretado como para moverlo hacia atrás (retraerlo) sobre el glande. En otros casos, especialmente en algunas partes de África, se recomienda la circuncisión a los niños mayores o los hombres a fin de reducir el riesgo de contraer algunas infecciones de transmisión sexual.
La circuncisión podría tener diversos beneficios para la salud, como los siguientes:
- Higiene más sencilla. La circuncisión hace que sea más simple lavar el pene. Sin embargo, a los niños no circuncidados se les puede enseñar a lavarse regularmente por debajo del prepucio.
- Menor riesgo de padecer infecciones urinarias. El riesgo de padecer de infecciones urinarias en hombres es bajo; sin embargo, estas infecciones son más frecuentes en los hombres no circuncidados. Las infecciones graves que se presentan en las primeras etapas de la vida pueden causar problemas renales posteriormente.
- Menor riesgo de contraer infecciones de transmisión sexual. Los hombres circuncidados podrían tener un menor riesgo de contraer ciertas infecciones de transmisión sexual, como VIH. Igualmente, las prácticas sexuales seguras siguen siendo esenciales.
- Prevención de problemas en el pene. Ocasionalmente, puede ser difícil o imposible retraer el prepucio del pene no circuncidado (fimosis). Esto puede provocar inflamación en el prepucio o en la cabeza del pene.
- Menor riesgo de padecer cáncer de pene. Si bien el cáncer de pene es poco frecuente, es menos común en los hombres circuncidados. Asimismo, el cáncer del cuello del útero es menos frecuente en las parejas sexuales femeninas de los hombres circuncidados.
Los riesgos de no ser circuncidado, sin embargo, no solo son raros, sino que también se pueden evitar con el cuidado adecuado del pene.
La circuncisión podría no ser una opción si existen determinados trastornos en la coagulación de la sangre. Además, la circuncisión podría no ser adecuada para bebés prematuros que aún requieren atención médica en la sala de recién nacidos del hospital o los bebés que nacen con anomalías en el pene.
La circuncisión no afecta la fertilidad y, en general, no se cree que aumente o disminuya el placer sexual para los hombres o sus parejas.